...cuando decidí probar la Autopista de Neutrones... Los primeros encontronazos con estas densas estrellas fueron un poco "movidos", pero salí bien librado de los mismos... hasta que mi ruta me llevó con una enana blanca. Había leído lo peligrosas que eran estas malditas y el respeto que ha de tenérseles... pero embriagado con las mieles de los grandes saltos pensé 'qué puede malir sal?' y allá fuí, enfilando mi fiel Leonora Christine hacia lo que me pareció una zona segura del penacho cósmico de la estrella...
Nunca lamenté tanto el haberme puesto pantalones blancos como en ese momento en que mi nave decidió pasar en rápida sucesión a modo Lavarropas y Tostadora. Mientras la sensual voz de la computadora central me insformaba que mi nave se hacía pedazos y hasta el fregadero de la cocina dejaba de funcionar, yo trataba de no vomitar las galletitas, mantener pegado el cul* al asiento, acordarme de cómo se volaba y escapar de ese infierno, todo a la vez, en tanto lograba mantener a la Leonora lo bastante alineada con el siguiente sistema como para que -algún día- el Motor de Distorsión se dignara a sacarnos de allí...
Así que aquí me encuentro, camaradas Comandantes, a 200 saltos de mi destino, por donde Spock perdió la peluca, con todos los sistemas de la nave dañados, un Motor de Distorsión que a veces no quiere funcionar, un cristal de cabina que se romperá conque tan solo lo mire feo y sin módulos de reparación porque... bueno..., no, no hay excusa.
Gracias si alguno leyó hasta aquí Comandantes, si he de morir tratando de llegar a mi destino, al menos dejo constancia de que este viaje fue -como dicen los españoles- la * *.
Shirakawa out."
o7
Nunca lamenté tanto el haberme puesto pantalones blancos como en ese momento en que mi nave decidió pasar en rápida sucesión a modo Lavarropas y Tostadora. Mientras la sensual voz de la computadora central me insformaba que mi nave se hacía pedazos y hasta el fregadero de la cocina dejaba de funcionar, yo trataba de no vomitar las galletitas, mantener pegado el cul* al asiento, acordarme de cómo se volaba y escapar de ese infierno, todo a la vez, en tanto lograba mantener a la Leonora lo bastante alineada con el siguiente sistema como para que -algún día- el Motor de Distorsión se dignara a sacarnos de allí...
Así que aquí me encuentro, camaradas Comandantes, a 200 saltos de mi destino, por donde Spock perdió la peluca, con todos los sistemas de la nave dañados, un Motor de Distorsión que a veces no quiere funcionar, un cristal de cabina que se romperá conque tan solo lo mire feo y sin módulos de reparación porque... bueno..., no, no hay excusa.
Gracias si alguno leyó hasta aquí Comandantes, si he de morir tratando de llegar a mi destino, al menos dejo constancia de que este viaje fue -como dicen los españoles- la * *.
Shirakawa out."
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. Si no te cuadra ninguna de las opciones que te han dicho, avisa en qué sistema estás y miro si tengo suficiente combustible para ir a echarte una mano con el porta naves.
